La "inmensa mole de Santa María" no solo es relicario sino depósito de aconteceres. Bajo sus bóvedas doradas pudieron ser velados los restos mortales de la reina Isabel la Católica en un final de jornada de su séquito camino de Granada; fué tambien escenario de "escándalos, alborotos y algaradas" entre regidores e hidalgos por la posesión de unos asientos teniendo que intervenir en la disputa Felipe II; durante la invasión francesa fue refugio de la imagen de Linarejos, viéndose obligados autoridades y principales a prestar juramento de fidelidad al rey intruso ante su altar mayor, compensada tan desagradable vejación con la asistencia del general Reding a una misa de acción de gracias por la victoría de Bailén.
No se conocen hasta ahora documentos referentes a su creación cómo parroquía, pero al menos su dta documentada fidura en un escrito episcopal del año 1401 refiriéndose *..a los Priores é Dignidades de San Pedro de Ibros y de Santa María de Rús y de Santa María de Linares*. Al paso de lo diglos algunos de estos servidores eclesiásticos figuran por su vocación y entrega rotulando varias calles de la ciudad: Jerónimo Rentero, RafaelAlvarez Lara, Bartolomé Torres Quirós, apóstoles, pastores fieles, mártires...
Textos de, Juan Sanchez Caballero
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